Casos donde intervino un perito criminólogo o criminalísta

Caso 1: El Asesinato de Meredith Kercher (Italia)

Resumen del Caso: En 2007, Meredith Kercher, una estudiante británica, fue encontrada asesinada en su apartamento en Perugia, Italia. Amanda Knox, su compañera de cuarto estadounidense, y Raffaele Sollecito, el novio de Knox, fueron inicialmente acusados y condenados por el asesinato.

Intervención del Criminólogo: Rudy Guede, un inmigrante marfileño, también fue implicado en el crimen. Sin embargo, la defensa de Knox y Sollecito contrató a un criminólogo de parte para revisar las pruebas. El criminólogo cuestionó la validez de las pruebas de ADN presentadas por la fiscalía, sugiriendo que podían haber sido contaminadas. Además, se realizaron análisis independientes de las escenas del crimen y las pruebas, que apoyaron la teoría de que Guede, quien fue condenado por separado, había actuado solo.

Resultado: Las revisiones de las pruebas y las conclusiones del criminólogo de parte desempeñaron un papel crucial en las apelaciones de Knox y Sollecito. Finalmente, ambos fueron absueltos en 2011, y la Corte Suprema de Italia confirmó la absolución definitiva en 2015.

Caso 2: El Asesinato de Hae Min Lee (Estados Unidos)

Resumen del Caso: En 1999, Hae Min Lee, una estudiante de secundaria en Baltimore, Maryland, fue asesinada. Adnan Syed, su exnovio, fue condenado por el asesinato en 2000. El caso ganó atención internacional tras la publicación del podcast "Serial" en 2014, que cuestionaba la condena de Syed.

Intervención del Criminólogo: El equipo de defensa de Syed contrató a criminólogos de parte para reexaminar las pruebas y la investigación original. Uno de los puntos clave fue el análisis de la línea de tiempo y la ubicación de Syed basada en registros de teléfonos móviles. Los criminólogos de parte argumentaron que los registros de las torres de telefonía móvil no eran suficientemente fiables para ubicar a Syed en la escena del crimen en el momento del asesinato.

Resultado: En 2016, un juez anuló la condena de Syed, citando la ineficaz asistencia legal original y las nuevas pruebas presentadas por los criminólogos de parte. Aunque Syed sigue en prisión en espera de un nuevo juicio, la intervención de los criminólogos ha sido esencial para reabrir el caso.

Caso 3: El Caso de la Masacre de Port Arthur (Australia)

Resumen del Caso: En 1996, Martin Bryant llevó a cabo una masacre en Port Arthur, Tasmania, matando a 35 personas e hiriendo a 23 más. Fue arrestado y confesó el crimen.

Intervención del Criminólogo: Aunque Bryant se declaró culpable, un criminólogo de parte fue contratado para analizar su estado mental y la capacidad para entender sus acciones. El criminólogo presentó un informe detallado sobre la salud mental de Bryant, sugiriendo que tenía discapacidades intelectuales significativas y problemas psicológicos que podrían haber afectado su capacidad para tomar decisiones racionales.

Resultado: El informe del criminólogo no cambió la condena de Bryant, quien fue sentenciado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. Sin embargo, el análisis proporcionó una comprensión más profunda de las motivaciones y el estado mental del perpetrador, lo que influyó en la discusión pública y las políticas relacionadas con la salud mental y la violencia.

Caso 4: El Asesinato de Laci Peterson (Estados Unidos)

Resumen del Caso: En 2002, Laci Peterson, una mujer embarazada, desapareció en Modesto, California. Su esposo, Scott Peterson, fue acusado y condenado por su asesinato y el de su hijo nonato.

Intervención del Criminólogo: La defensa de Scott Peterson contrató a criminólogos de parte para revisar las pruebas y la metodología de la investigación. Estos criminólogos cuestionaron la interpretación de las pruebas forenses, incluyendo la localización del cuerpo de Laci y las pruebas circunstanciales utilizadas para condenar a Scott.

Resultado: A pesar de los esfuerzos de los criminólogos de parte, Scott Peterson fue condenado a muerte en 2005. Sin embargo, en 2020, la Corte Suprema de California anuló la sentencia de muerte debido a errores en la selección del jurado. La intervención de los criminólogos sigue siendo un punto de referencia en los esfuerzos de apelación y revisión del caso.

Caso 5: El Caso de Casey Anthony (Estados Unidos)

Resumen del Caso: En 2008, Caylee Anthony, una niña de dos años, fue reportada como desaparecida por su abuela materna en Florida. Poco después, se encontraron los restos de la niña cerca de la casa familiar. Su madre, Casey Anthony, fue acusada de asesinato en primer grado.

Intervención del Criminólogo: La defensa de Casey Anthony contrató a un criminólogo de parte que cuestionó la interpretación de las pruebas forenses presentadas por la fiscalía. En particular, se argumentó que la evidencia de supuestos rastros de descomposición y cloroformo en el maletero del auto de Casey era insuficiente y podría haber sido malinterpretada. El criminólogo también ofreció una teoría alternativa de la muerte accidental, sugiriendo que la niña podría haber muerto por ahogamiento en la piscina familiar, y que el comportamiento errático de Casey después de la muerte se debía a un trauma psicológico.

Resultado: Casey Anthony fue absuelta del cargo de asesinato en 2011, aunque fue condenada por mentir a la policía. El caso sigue siendo altamente controvertido, pero la intervención del criminólogo de parte fue clave para sembrar dudas razonables en el jurado.

Caso 6: El Asesinato de Marta del Castillo (España)

Resumen del Caso: Marta del Castillo, una adolescente sevillana, desapareció en 2009 y nunca se encontró su cuerpo. Miguel Carcaño, un conocido de Marta, confesó haberla asesinado y posteriormente cambió su versión de los hechos varias veces.

Intervención del Criminólogo: La familia de Marta contrató a un criminólogo de parte para analizar las declaraciones contradictorias de los acusados y las pruebas circunstanciales. El criminólogo también revisó los posibles escenarios del crimen, aportando hipótesis alternativas sobre la ubicación del cuerpo de Marta y cuestionando la veracidad de las confesiones de Carcaño.

Resultado: A pesar de los esfuerzos del criminólogo y la presión mediática, el cuerpo de Marta del Castillo nunca ha sido encontrado. Miguel Carcaño fue condenado a 21 años de prisión por asesinato, pero las preguntas sobre la participación de otros implicados y el paradero del cuerpo siguen sin respuesta. La intervención del criminólogo ayudó a mantener viva la investigación y la búsqueda de justicia.

Caso 7: El Asesinato de Oscar Pistorius (Sudáfrica)

Resumen del Caso: En 2013, el atleta olímpico sudafricano Oscar Pistorius disparó y mató a su novia, Reeva Steenkamp, en su casa. Pistorius alegó que la había confundido con un intruso.

Intervención del Criminólogo: La defensa contrató a criminólogos de parte para reconstruir la escena del crimen y analizar las circunstancias que llevaron a los disparos. Los criminólogos analizaron la posición del cuerpo de Steenkamp y la trayectoria de las balas, así como la posibilidad de que Pistorius realmente creyera que estaba disparando a un intruso. También se exploró el estado mental de Pistorius en el momento del incidente, argumentando que su discapacidad física podría haber influido en su percepción del peligro.

Resultado: Pistorius fue inicialmente condenado por homicidio culposo en 2014, pero tras varias apelaciones y revisiones, su condena fue aumentada a homicidio en 2017, con una sentencia de 13 años y 5 meses. Aunque la intervención del criminólogo no evitó la condena, influyó en la interpretación de los hechos y en las decisiones judiciales durante el proceso de apelación.

Caso 8: El Caso de Madeleine McCann (Reino Unido/Portugal)

Resumen del Caso: En 2007, Madeleine McCann, una niña británica de tres años, desapareció en un resort en Portugal. A pesar de una intensa investigación internacional, su paradero sigue siendo desconocido.

Intervención del Criminólogo: Varios criminólogos de parte han sido contratados tanto por la familia McCann como por otros interesados en el caso para analizar las diferentes teorías sobre lo que pudo haber sucedido. Estos criminólogos han revisado las pruebas forenses, examinado posibles pistas de secuestro, y cuestionado las acciones de la policía portuguesa y británica. También han analizado el comportamiento de los padres y la posibilidad de un encubrimiento, aunque estas teorías han sido ampliamente desacreditadas.

Conclusión

Estos casos demuestran cómo la intervención de criminólogos de parte puede influir significativamente en los juicios, proporcionando análisis detallados y cuestionando la validez de las pruebas presentadas por la fiscalía. Aunque no siempre cambian el veredicto final, sus aportaciones son cruciales para garantizar que se consideren todas las perspectivas y se haga justicia de manera justa y equitativa.